José Tomás Román Martín, conocido universalmente como José Tomás, es una de las figuras más emblemáticas y revolucionarias del toreo en el siglo XXI. Nacido el 20 de agosto de 1975 en Galapagar, Madrid, su carrera ha dejado una huella indeleble en la historia de la tauromaquia, marcada por su valentía, estilo y un compromiso profundo con el arte del toreo.

Primeros Pasos en la Arena José Tomás debutó en público a la temprana edad de 12 años en una becerrada en Colmenarejo en 1987, demostrando desde entonces un talento y una pasión que presagiaban su futuro estelar en el mundo del toro. Su debut como novillero en la Feria de San Blas en Valdemorillo en 1997 fue solo el comienzo de una serie de actuaciones que captarían la atención mundial.

Un Novillero en México En 1994, José Tomás llevó su carrera a México, un país con una rica tradición taurina, donde debutó en la Monumental de México. Esta experiencia enriqueció su estilo y profundizó su comprensión del toreo, preparándolo para los desafíos futuros en su carrera.

La Alternativa y su Confirmación Tomó la alternativa en 1995 en la Plaza de Toros de México, con Jorge Gutiérrez como padrino y Manuel Mejía como testigo, enfrentándose a toros de la ganadería Xajay. Su confirmación en Las Ventas en mayo de 1996, con figuras como Ortega Cano y Jesulín de Ubrique, consolidó su reputación como una estrella emergente en el toreo.

Un Torero de Plazas Emblemáticas A lo largo de su carrera, José Tomás ha toreado en algunas de las plazas más importantes del mundo, incluyendo La Monumental de Barcelona, La Maestranza de Sevilla y Las Ventas en Madrid. Su estilo, caracterizado por un valor sin límites y una técnica impecable cerca del toro, ha cautivado a aficionados y críticos por igual.

Estilo y Arte en la Lidia El estilo de José Tomás es único, combinando un atrevimiento y una habilidad con el capote que pocos toreros han igualado. Su capacidad para manejar el capote a milímetros del toro y su audacia en la lidia lo han convertido en un ícono del toreo moderno, admirado tanto por su valor como por su arte.

Retiro y Legado Aunque actualmente está inactivo en los ruedos, José Tomás no ha dejado de influir en el mundo del toro. Se dedica a gestionar fundaciones que él mismo creó para fomentar la tauromaquia nacional. Su hermano, Andrés Román Martín, sigue siendo su mozo de espadas, manteniendo la tradición y el legado familiar en el mundo del toro.

José Tomás sigue siendo una leyenda viva, un torero cuya audacia y arte continúan inspirando a generaciones de aficionados y toreros en todo el mundo. Su legado no solo se define por sus triunfos en la arena, sino también por su compromiso continuo con la promoción y el desarrollo de la tauromaquia.